
En el camino Iván sacó a los perros del coche y corrieron al lado del coche. En Hontanillas encontramos a Upi y nos explicó el proyecto y nos enseñó el pueblo. Había una iglesia, un ayuntamiento, una panadería, un cementerio y muchas otras casas, pero todas estaban derrumbadas y en todos lados crecen las zarzas. De la panadería casi solo se quedó el horno.
Una casa ya está reconstruida y tienen un huerto enorme.

Hay también un baño y muchos caminos entre las zarzas. Iván nos enseño los conejos, que tienen desde hace poco y que se reproducen muy rápidamente, y que viven en una caseta casi reconstruida. Luego Iván y los otros van a comer los conejos y los conejos ya tienen nombres como "Al ajillo" y "Al pilpil".

Cuando volvimos Emilia y yo continuamos con las clases y el diario. Por la tarde, Javier, Rainer, Emilia y yo dimos una vuelta por las montañas y pudimos ver muy lejos sobre el campo.

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